ALTERNATIVA lanza un mensaje de tranquilidad al resto de partidos (publicado en “La Información” Marzo 2010)
Antes de empezar a hablar de política, hay que hablar de ciudadanía. Es preciso recuperar las emociones básicas, lo que nos va a servir para vivir, para gestionar las situaciones que se plantean a diario.
Entonces, cuando vivimos conscientemente, podemos sentir la necesidad de mejorar las relaciones entre nosotros, con los que estamos cercanos, con las autoridades, etc. Empezamos a hacer política. Una política que tiene sus raíces en las diferencias sociales y económicas, en el análisis que hacemos de la vida y lo que esperamos de ella.
Así, los distintos grupos humanos eligen sus representantes en función de las respuestas que proponen a los distintos conflictos y problemas. Cada opción política tiene pues su grupo, aquel que le es más o menos fiel, en función de las diferencias que marca con los otros. En ocasiones las respuestas se parecen tanto que solo el sentido de pertenencia a un partido por razones que exceden al ámbito político hacen a las personas decantarse a uno u otro lado.
Cuando el análisis se hace partiendo de unos valores diferentes, las respuestas también son distintas. Una política basada en ideas más sociales y participativas requiere de respuestas elaboradas colectivamente. No es tan sencillo como adaptar un programa electoral prefabricado pero seguramente es más productivo para los ciudadanos.
Por eso, cuando el nacimiento de ALTERNATIVA ha puesto nerviosos a algunos partidos políticos de Colmenarejo, aparte de recordar a Goethe: “Sus estridentes ladridos son señal de que cabalgamos”, quizá sea preciso enviar un mensaje de tranquilidad, asegurándoles que nadie que haya confiado en ellos, que ningún ciudadano de Colmenarejo que haya apoyado su opción convencido, cambiará para apoyar a ALTERNATIVA por Colmenarejo.
No somos lo mismo que ellos, no compartimos su forma de trabajar ni la de eludir los problemas. Nuestro objetivo es más cercano y sencillo: mejorar la vida cotidiana de la mayoría de los vecinos. Por eso nunca nos apoyarán los que cierran los ojos ante la especulación, los que no reprueban la opacidad de la gestión municipal, los que defienden el despotismo ilustrado, los que tienen inversiones pendientes, los que piensan que haber nacido en Colmenarejo es una patente de corso contra los que solo viven en Colmenarejo, los que se divierten viendo sufrir a los animales, aquellos para los que la cultura es solo la fiesta del pueblo y los que gustan de aparcar el coche impidiendo el paso de los demás.
Nunca esas personas apoyarán a ALTERNATIVA, como tampoco lo harán los que antepongan los apellidos a las ideas.
Nuestro camino lo hacemos y lo seguiremos haciendo con los vecinos de Colmenarejo incluyendo a los que han nacido en Jaén, en Nador, en Timisoara, en Birmingham, en Râmnicu, en Cuenca, en Madrid o en la Valencia venezolana. Con los jubilados que trabajan por un futuro mejor y con los jóvenes que quieren aprender de ellos. Con los pequeños comerciantes que necesitan apoyo para mantenerse y con los consumidores que necesitan un comercio que dé vida al pueblo. Y en ese trayecto se irán incorporando aquellos que nos conozcan por lo que hacemos y por lo que evitamos. No nos debemos a nadie, solo a nuestro proyecto. No somos lo mismo y por eso no vamos a pedir nada, vamos a mostrar quiénes somos. Nuestra trayectoria puede tener errores, pero es coherente. Nuestro trabajo es estudiar la situación de Colmenarejo para que cualquiera que forme parte de nuestro proyecto o lo quiera compartir, sea consciente de cuáles son las posibilidades reales más allá de las conocidas promesas que se oirán nuevamente en el 2010.
Corresponsabilidad es la palabra que elegimos para definir el gobierno de un municipio. Y esa palabra debe ir unida a comunicación y transparencia.
Dejamos a otros grupos políticos la bandera del continuismo y la del ataque verbal. Estamos trabajando para mejorar el lugar donde viviremos: el futuro.