La incompetencia y falta de madurez de la alcaldesa de Colmenarejo, dejan la gestión del Ayuntamiento en manos del Concejal de VeciColme, Fernando López Sevillano, que reúne en su persona las concejalías de Urbanismo, Deportes, Juventud, Comercio, Fiestas y Desarrollo local, que gozan de mayor visibilidad y protagonismo.
La situación de pandemia ha venido sirviendo de excusa al Equipo de Gobierno para justificar su falta de respuesta a las necesidades de gestión y servicios que demandan los vecinos, provocando en la actualidad casi un desmantelamiento del Ayuntamiento, sin que en sus actuaciones y dejaciones exista la menor lógica.
Si nos ceñimos a los últimos acontecimientos, el día 17 de abril se detecta un brote de COVID-19 entre los empleados del edificio del Ayuntamiento de Colmenarejo y hasta el día 21 no se toma ninguna decisión, momento en que la alcaldesa ordena el teletrabajo hasta tanto se haga la desinfección del ayuntamiento.
A estas alturas, 20 de mayo, los concejales de la oposición no sabemos si se han tomado las medidas de higiene y seguridad en el trabajo sobre la contaminación de las dependencias del Ayuntamiento, no hemos sido informados de si el Ayuntamiento ha recuperado su actividad habitual y los trabajadores han vuelto a sus puestos de trabajo, no se nos ha informado de por qué no se ha celebrado el Pleno ordinario del 27 de abril, ni las Comisiones Informativas de la segunda semana de mayo, con lo cual suponemos que tampoco se convocará el Pleno correspondiente al 25 de mayo. Nos sorprende que haya desaparecido la urgencia de aprobación de los Presupuestos y ya se van a cumplir dos años y medio sin presupuestos y aún nos manejamos con los que aprobó el Partido Popular en 2018.
Desde hace meses tenemos pedida documentación sobre las compras y contratos que ha realizado Fernando López Sevillano para el Polideportivo, sobre el resultado de la campaña del test municipal de COVID-19 que ha costado en torno a los 20.000 euros, el expediente actualizado sobre el Plan de Inversión Regional (PIR) y el expediente actualizado sobre los convenios que ha firmado Fernando López Sevillano sin la validación de Secretaría.
Si hasta hace poco la alcaldía era bicéfala, y estaba representada por la Alcaldesa Miriam Polo, pero con las decisiones que tomara Fernando López, ahora, descaradamente, es este superconcejal el que ha tomado como rehén político al Partido Socialista y a Unidas Podemos, que se pliegan a sus condiciones y caprichos.
La dejadez e incompetencia de la Alcaldesa y del concejal y Secretario General de la Agrupación del PSOE, Luis M. Gómez de Agüero, han derivado en que sea Fernando López Sevillano quien mande en el Ayuntamiento de Colmenarejo. El PSOE, representado por estos dos concejales, mantiene la alcaldía, pero quien se beneficia de la visibilidad, según su pacto secreto es Fernando López Sevillano, quien ha conseguido el sueño de su vida: mandar en Colmenarejo.
Las primeras consecuencias son la desaparición de visibilidad de la alcaldesa Miriam Polo y las decisiones caprichosas de Fernando López Sevillano en cuyas manos estamos, a punto de transcurrir dos años con este Equipo de Gobierno (o de desgobierno).
Las decisiones de veleta que pueda tomar el superconcejal nos inquietan.