El pasado 15 de junio se cumplieron tres años desde que accedió a la alcaldía de Colmenarejo Miriam Polo y Fernando López Sevillano, (“tanto monta, monta tanto Miriam Polo con Fernando…”) personajes ambos que quedarán grabados en la memoria de muchos vecinos de nuestro pueblo como los principales responsables (no los únicos) de una etapa de desgobierno, marcada por las decisiones caprichosas, por la burla constante a la legalidad, por la falta de respeto hacia funcionarios, vecinos y miembros de la Corporación, por la incompetencia en la gestión de los recursos públicos, por los abusos de poder, por la falta de transparencia, por la utilización de trapacerías para mantener los cargos y retribuciones, por boicotear el derecho a la información de los concejales, por el abandono y la desidia en el mantenimiento de los servicios públicos, por el desprecio a la ejecución de los acuerdos tomados por el Pleno y por la falta de Programa de Gobierno y planificación de la gestión.
Este Equipo de Gobierno es lo más parecido a un autobús cuesta abajo, sin frenos, en el que sus componentes se disputan el volante. ¡Desastre seguro! El resto de sus compañeros de viaje: Luis M. Gómez de Agüero, del PSOE; Montserrat Palazón, de VeciColme y Marga Cuervo, de Unidas Podemos, comparten con los primeros citados el dudoso honor de pertenecer –aún- a ese equipo.
Aparte de las ya mencionadas “cualidades” se les pueden añadir algunas más:
-
Será el único Equipo de Gobierno que no haya sido capaz de realizar siquiera un Presupuesto Municipal en todo su mandato.
-
El que disponiendo de más dinero para inversión y gasto que ninguna otra Corporación (unos seis millones de los Remanentes de Tesorería) ni tener la limitación de la regla de gasto, ha sido capaz de prestar algunos de los servicios básicos con un mínimo de calidad y ha desatendido el mantenimiento de vías, aceras, instalaciones y edificios públicos.
-
Quienes, por su ineptitud, han perdido más de dos millones de euros en inversiones del PIR (1,2 M de los mismos en el polideportivo).
-
No han resuelto, sino agravado, los problemas de personal que viene arrastrando nuestro Ayuntamiento, a pesar de que ya se tenía un trabajo avanzado sobre el estudio de los puestos de trabajo (RPT).
Sobre la alcaldesa, pende una moción de censura que ha intentado retrasar por procedimientos nada democráticos y cuya aplicación inexorablemente caerá por sentencia judicial tras un año de ocupar el cargo de forma ilegítima y haber dejado por los suelos la representación institucional de Colmenarejo, además de dos denuncias por prevaricación, que con el tiempo la justicia determinará.
Sigue manteniéndose a flote Fernando López Sevillano, promotor de toda esta situación y del caos generado como concejal de festejos y deportes, al haber dilapidado varias partidas absolutamente necesarias (mantenimiento de piscina y pago empresa monitores deportivos para actividades adultos e infantiles) sin control alguno y que lleva once años viviendo de la política “a su manera”.